viernes, septiembre 30, 2005

Advertencia

Hay días en los que uno está condenado a que el mundo lo malinterprete. Por eso, amigo o amiga, quiero prevenirte: si pensás dejar un comentario en éste o en cualquier otro Blog, tené en cuenta que por la red navega cualquiera. Lo que escribas puede leerlo tu amor, tu jefe o tu madre. El amante de tu amante, el padre de tu jefe, el amor de tu madre. Así que preguntale.

Siempre supe que vivimos en un pañuelo chico y que la lengua no es más que un conjunto de malos entendidos. Pero a pesar de tenerlas claras son dos verdades que no dejan de atormentarme. (También sé que Dios ha muerto y sin embargo, no me queda ninguna duda de que me sigue castigando).

Qué alguien me explique qué cuernos le pasaba a Laurita esta mañana, y si a ese le queda un rato, que convenza a Mariano de no abandonar su costiblog, y si al mismo le sobra todavía un resto de paciencia, que le haga entender a mi bombón que en realidad él piensa como yo.

2 comentarios:

istu dijo...

1. Quizá los malos entendidos no sean tan malos. Recuerdo una fiesta donde malentendiste a alguien, pero con final feliz.

2. Seguramente tu bombón sabe que vos pensás como él. No te preocupes porque cada vez que piensa lo contrario, al mundo mismo le sobra tiempo para explicarle que no.

Felicitaciones por tu blog, mi bienentendida E

PD: marilynitud de ser malinterpretada? No... solo que el x izquierdo pisó primero el piso esta mañana porque el X no soltaba el otro.

Mariano Dorr dijo...

¿Y a M... qué le pasaba hoy? ¿y ayer? ¿y antes de ayer? ¿qué le pasó a M... en los últimos 21 años y qué tiene pensado hacer el resto de su vida?
Esa chica tiene el control remoto de mi corazón...

Y te prometo que no voy a abandonar "En busca del costicismo perdido".

Aprovecho este espacio de energía blanca para escribir que tu marido es de oro puro...